Durante la semana del 22 al 26 de septiembre, dentro de la oferta formativa municipal, el Ayuntamiento de Alovera impartió un curso de cestería tradicional en sus instalaciones municipales.
Para ello, en julio se abrió el plazo de inscripción, restringido a personas empadronadas, con acceso gratuito y un único coste asociado al material necesario para la elaboración de piezas que los participantes podrían llevarse al finalizar. Las veinte plazas disponibles se agotaron rápidamente, con una buena acogida tanto por franjas de edad como por género. Esto permitió formar dos grupos diferenciados, que realizaron la misma acción formativa y práctica en dos turnos para una atención más individualizada. El curso fue dirigido por Berta Bugallo, una profesional de la cestería con experiencia en la Escuela de Folklore de Guadalajara y en talleres de diversos municipios. Es especialista en el manejo de diversas fibras, como el esparto, la paja y el mimbre. El objetivo del curso fue, por un lado, recuperar este oficio tan relevante en la identidad provincial y, por otro, fomentar su aprendizaje entre nuevos alumnos para que actúen como transmisores y difusores.
Todos los participantes completaron no solo la formación teórica, sino también la elaboración de una cesta propia, adecuada para su uso cotidiano, junto con otros recursos. Esta iniciativa fue subvencionada en parte por la Diputación de Guadalajara a través del programa «Nuestra tierra, Nuestra cultura», y con la financiación del Ayuntamiento permitió a los vecinos disfrutar de forma gratuita de esta propuesta formativa innovadora.
El Ayuntamiento comunicó a los alumnos y alumnas, al entregarles sus diplomas acreditativos, su intención de repetir este tipo de cursos, dada la gran acogida generada —con lista de espera incluida—, el buen desarrollo de la actividad y el alto nivel de motivación y deseo de continuidad.
A lo largo del año, Alovera ofrece en sus escuelas municipales formación gratuita en música, expresiones artísticas y, para ciertas franjas de edad, artes escénicas, artesanía y otros usos artísticos. Además, las asociaciones locales proporcionan opciones formativas en encaje de bolillos o patronaje.