La mayoría de ellas entre los 18 y los 50 años de edad.
Durante su primer año de funcionamiento, el Centro de Atención Integral a Mujeres Víctimas de la Violencia Sexual en Guadalajara, ha llevado a cabo aproximadamente 600 actuaciones en las que se ha brindado ayuda a un total de 54 mujeres.
La delegada de Igualdad en la provincia, Laura Gil, ha hecho balance de estos doce primeros meses, recordando que se trata de “un recurso público, especializado y gratuito para acompañar, proteger y reparar a las mujeres que han sufrido violencia sexual”, al que el Gobierno de Castilla-La Mancha, con participación de fondos europeos Next Generation, ha destinado una inversión de 750.000 euros.
El centro ha recibido un total de 70 consultas iniciales, que han supuesto la derivación a una actuación integral en el mismo de 54 mujeres, que en cerca del 67 por ciento de los casos se trata de personas de entre 18 y 50 años de edad.
“A lo largo del año, se han llevado a cabo 330 intervenciones psicológicas con víctimas, 69 intervenciones jurídicas, 198 intervenciones sociales y más de 50 acciones de información y acompañamiento general”, ha explicado Laura Gil.
Gil ha agradecido el trabajo realizado por el equipo del centro y ha recordado que estos espacios desarrollarán una “importante labor” de prevención y de sensibilización. “Castilla-La Mancha ha sido una región valiente en su compromiso con la igualdad porque, frente a quienes niegan la violencia machista, nuestra respuesta ha sido reforzar los recursos, mejorar los protocolos y estar cerca de las mujeres, a quienes queremos trasladar un mensaje claro: no están solas. La vergüenza y el miedo deben pasar al lado de los agresores, no de las víctimas”, ha asegurado.
Recurso de acogida para mujeres víctimas de la violencia machista
Por otro lado, la delegada de Igualdad se ha referido a la situación que atraviesa el recurso de acogida para mujeres víctimas de la violencia de género, ubicado en la ciudad de Guadalajara en una localización desconocida por motivos de seguridad tanto de las mujeres como de sus hijos e hijas.
Gil ha vuelto a poner de manifiesto “la persistente falta de respuesta del Ayuntamiento de Guadalajara ante las deficiencias detectadas”, relacionadas con el impago de suministros, los retrasos en los pagos de nóminas y de ayudas semanales a las propias mujeres, así como averías y fallos en electrodomésticos y en equipamientos básicos”.
Después de varios requerimientos durante el verano, de una reunión con el Consistorio el pasado 4 de septiembre y de una comisión de seguimiento celebrada el 13 de octubre, “constatamos con preocupación que ninguno de estos problemas se había solucionado, y que el Ayuntamiento no contaba con ninguna propuesta concreta para abordarlos”, ha explicado la delegada.
De hecho, la responsable de Igualdad ha valorado como “especialmente preocupante” las últimas manifestaciones realizadas por el concejal de Mujer en el Ayuntamiento de Guadalajara, en las que aseguraba “que los problemas están resueltos, cuando la realidad demuestra lo contrario”.
La delegada ha asegurado que la Consejería de Igualdad seguirá instando al Consistorio “que asuma sus responsabilidades y deje de escudarse en la empresa externa que gestiona el centro” y le ha pedido decidir “si forma parte del problema o si apuesta por soluciones inmediatas”, al tiempo que el Gobierno regional analiza “todas las opciones administrativas” para asegurar que el centro “funcione a la perfección”, sin descartar ningún escenario, como que el Ayuntamiento deje de participar en el mantenimiento.
Los recursos de acogida para víctimas de violencia de género ayudan a las mujeres que abandonan sus hogares, juntos a sus hijos e hijas, para huir de su agresor. Sus localizaciones no se conocen públicamente por motivos de seguridad y son financiados al cien por cien por el Gobierno de Castilla-La Mancha, que se encarga también de todas las acciones de intervención psicológica y social, así como de todas las derivaciones. Los ayuntamientos participan en las labores básicas de mantenimiento, de forma directa o a través de una externalización, con la financiación que aporta la Consejería de Igualdad.
El recurso de Guadalajara es el más grande de toda Castilla-La Mancha. Fue puesto en marcha en el anterior mandato ante la necesidad de incrementar espacios por la situación de pandemia.